¿Qué puedes hacer tú?
Juntos podemos actuar para detener esta creciente catástrofe ambiental y proteger la pesca para el futuro.
Recomendaciones
Consumidores
- Diversificar el consumo de productos del mar para incluir menos especies que dependan de piensos que contengan harinas y aceites de pescado (FMFO, por sus siglas en inglés: Fish Meal and Fish Oil) - sobre todo especies carnívoras, como el salmón y las gambas y langostinos. A través de sus decisiones en cada compra, los consumidores tienen la oportunidad de enviar un mensaje claro a la industria, mostrando que les preocupan los impactos de la pesca de reducción en las personas y el medio ambiente. Pueden hacerlo optando por especies que no se alimenten con FMFO y reduciendo el consumo de pescado y mariscos de cría insostenibles.
- Mostrar nuestra preocupación a las empresas, poniéndose en contacto con los supermercados y criadores de pescados y mariscos, y corriendo la voz acerca de estas temáticas.
Supermercados
- Adoptar altos estándares de transparencia acerca de la cadena de suministro: identidad de procesadores, proveedores, empresas de producción de piensos, productores de FMFO, así como localización de las pesquerías de reducción.
- Comprometerse a evitar pescados y mariscos que dependan de FMFO proveniente de pescado salvaje. Los supermercados deben establecer una hoja de ruta para la eliminación del empleo de FMFO en sus productos y llevar a cabo auditorías periódicas para garantizar que esto se está implementando.
Certificadoras
- Las pesquerías de reducción no deberían ser certificadas. La certificación de las pesquerías de reducción da una falsa impresión de que la explotación del pescado salvaje para ser empleado en harina y aceite de pescado (FMFO) puede ser sostenible.
- Las certificaciones de pescado salvaje, como el Marine Stewardship Council, deberían dejar de certificar pescado que no sea destinado a consumo humano directo, mientras que las certificaciones de acuicultura solo deberían certificar el pescado de piscifactoría que no dependa del uso de FMFO proveniente de pescado salvaje.
Industria de los piensos para acuicultura
- Pasar, para la fabricación de sus piensos, del empleo de pescado salvaje a alternativas más sostenibles. Si bien algunas empresas están dando unos primeros pasos para reducir su dependencia del pescado -en parte de los piensos para acuicultura que producen-, el empleo de FMFO debe eliminarse gradualmente en toda la industria para que se produzca un cambio transformador. Las empresas también deben dejar de usar FMFO para alimentar a otros animales, como cerdos, pollos o visones.
- Garantizar que las fuentes alternativas para piensos no den lugar a otros problemas sociales y ecológicos. Es fundamental que la industria comprenda y minimice los impactos negativos producidos por otras fuentes de ingredientes; por ejemplo, hay evidencias de enormes problemas ambientales y sociales vinculados con la expansión de la producción de soja y de aceite de palma, que actualmente no son suficientemente tenidos en cuenta por las existentes iniciativas de sostenibilidad.
Acuicultura
- La industria debe priorizar el cultivo de especies que no requieran pienso (por ejemplo, determinados moluscos), que requieran menos insumos (por ejemplo, tilapia) o que puedan ser alimentadas con una dieta completamente vegetariana (por ejemplo, carpa).
- Para las especies que necesiten piensos, debería presionar a los productores de piensos acuícolas para que proporcionen alternativas a los piensos derivados de FMFO que sean realmente sostenibles. La industria acuícola debe estar dispuesta a compartir el costo adicional que puedan implicar determinadas alternativas sostenibles.
Responsables políticos
- Implementar normas más estrictas sobre diligencia debida y transparencia en las cadenas de suministro de piensos acuícolas. Los gobiernos y los responsables políticos deben fortalecer los marcos de gobernanza para eliminar la pesca ilegal, no regulada y no declarada, así como el trabajo esclavo, evitar la sobrepesca y mejorar la transparencia y la comunicación en las cadenas globales de suministro pesquero.
- Desarrollar pautas para los ingredientes sostenibles en los piensos. Deben existir políticas que apoyen el desarrollo de industrias de piensos alternativos y proporcionen incentivos para una transición hacia ingredientes más sostenibles. Los responsables políticos deben fomentar una variedad de alternativas al pescado salvaje que no provoquen la destrucción de hábitats y ecosistemas naturales, así como otros enfoques innovadores y verdaderamente responsables.
- Los gobiernos deberían promocionar la eliminación de la presencia de pescado salvaje en los ingredientes de los piensos acuícolas. Además, este tipo de acuicultura no debería recibir subvenciones o ayudas públicas de ningún tipo.
- Diversificar el consumo de productos del mar para incluir menos especies que dependan de piensos que contengan harinas y aceites de pescado (FMFO, por sus siglas en inglés: Fish Meal and Fish Oil) - sobre todo especies carnívoras, como el salmón y las gambas y langostinos. A través de sus decisiones en cada compra, los consumidores tienen la oportunidad de enviar un mensaje claro a la industria, mostrando que les preocupan los impactos de la pesca de reducción en las personas y el medio ambiente. Pueden hacerlo optando por especies que no se alimenten con FMFO y reduciendo el consumo de pescado y mariscos de cría insostenibles.
- Mostrar nuestra preocupación a las empresas, poniéndose en contacto con los supermercados y criadores de pescados y mariscos, y corriendo la voz acerca de estas temáticas.
- Adoptar altos estándares de transparencia acerca de la cadena de suministro: identidad de procesadores, proveedores, empresas de producción de piensos, productores de FMFO, así como localización de las pesquerías de reducción.
- Comprometerse a evitar pescados y mariscos que dependan de FMFO proveniente de pescado salvaje. Los supermercados deben establecer una hoja de ruta para la eliminación del empleo de FMFO en sus productos y llevar a cabo auditorías periódicas para garantizar que esto se está implementando.
- Las pesquerías de reducción no deberían ser certificadas. La certificación de las pesquerías de reducción da una falsa impresión de que la explotación del pescado salvaje para ser empleado en harina y aceite de pescado (FMFO) puede ser sostenible.
- Las certificaciones de pescado salvaje, como el Marine Stewardship Council, deberían dejar de certificar pescado que no sea destinado a consumo humano directo, mientras que las certificaciones de acuicultura solo deberían certificar el pescado de piscifactoría que no dependa del uso de FMFO proveniente de pescado salvaje.
- Pasar, para la fabricación de sus piensos, del empleo de pescado salvaje a alternativas más sostenibles. Si bien algunas empresas están dando unos primeros pasos para reducir su dependencia del pescado -en parte de los piensos para acuicultura que producen-, el empleo de FMFO debe eliminarse gradualmente en toda la industria para que se produzca un cambio transformador. Las empresas también deben dejar de usar FMFO para alimentar a otros animales, como cerdos, pollos o visones.
- Garantizar que las fuentes alternativas para piensos no den lugar a otros problemas sociales y ecológicos. Es fundamental que la industria comprenda y minimice los impactos negativos producidos por otras fuentes de ingredientes; por ejemplo, hay evidencias de enormes problemas ambientales y sociales vinculados con la expansión de la producción de soja y de aceite de palma, que actualmente no son suficientemente tenidos en cuenta por las existentes iniciativas de sostenibilidad.
- La industria debe priorizar el cultivo de especies que no requieran pienso (por ejemplo, determinados moluscos), que requieran menos insumos (por ejemplo, tilapia) o que puedan ser alimentadas con una dieta completamente vegetariana (por ejemplo, carpa).
- Para las especies que necesiten piensos, debería presionar a los productores de piensos acuícolas para que proporcionen alternativas a los piensos derivados de FMFO que sean realmente sostenibles. La industria acuícola debe estar dispuesta a compartir el costo adicional que puedan implicar determinadas alternativas sostenibles.
- Implementar normas más estrictas sobre diligencia debida y transparencia en las cadenas de suministro de piensos acuícolas. Los gobiernos y los responsables políticos deben fortalecer los marcos de gobernanza para eliminar la pesca ilegal, no regulada y no declarada, así como el trabajo esclavo, evitar la sobrepesca y mejorar la transparencia y la comunicación en las cadenas globales de suministro pesquero.
- Desarrollar pautas para los ingredientes sostenibles en los piensos. Deben existir políticas que apoyen el desarrollo de industrias de piensos alternativos y proporcionen incentivos para una transición hacia ingredientes más sostenibles. Los responsables políticos deben fomentar una variedad de alternativas al pescado salvaje que no provoquen la destrucción de hábitats y ecosistemas naturales, así como otros enfoques innovadores y verdaderamente responsables.
- Los gobiernos deberían promocionar la eliminación de la presencia de pescado salvaje en los ingredientes de los piensos acuícolas. Además, este tipo de acuicultura no debería recibir subvenciones o ayudas públicas de ningún tipo.